Quienes vencen al enemigo de adentro no tienen nada que temer del enemigo de afuera

Owonrin Ose Ese Ifa 2


SE HIZO ADIVINACIÓN ANTES DE DEJAR EL CIELO


Okiti Sekpere, Awo eba ono, fue el Awo quien adivinó para este Odu cuando dejaba el cielo. Se le dijo que realizara sacrificios elaborados para impedir el riesgo de pasar grandes dificultades en la tierra. Él hizo votos en el cielo de no hacer maldad con sus herramientas mientras estuviera en la tierra. Se le dijo que si prosperaba con la maldad, debería hacer sacrificio a Eşu con un chivo, a su ángel guardián con una gallina pinta, jicotea, chiva y ropa blanca, y a los Awos que iba a realizar el sacrificio especial para él con cuatro palomas, nueces blancas y rojas de kola, ñame machacado. Él debía dirigirse al sendero para servir su cabeza con una paloma en la noche al lado derecho del camino y otra al lado izquierdo del camino después de limpiar el mismo con hojas preparadas con un sacerdote de Ifá.
Él estaba tan asustado por la magnitud y lo intrincado de los sacrificios que de manera terminante se rehusó realizarlos. Entonces se dirigió al mundo donde comenzó a trabajar como sacerdote de Ifá. Él era aficionado a realizar predicciones en la adivinación que sabía que no se iban a manifestar. A pesar de eso, él se volvió conocido por exigir honorarios exorbitantes por sus servicios. Eşu estaba igualmente determinado a causarle frustraciones porque no tenía a dónde ir. Nadie regresaba a él por segunda vez por adivinación, porque nunca hacía que satisficiera a la persona. En este punto, después de que se dio a conocer como curandero, nadie más fue a él por adivinación. Cuando se dio cuenta que había fallado, él decidió regresar al cielo para prepararse mejor.
Llegando al cielo, se dirigió al mismo Awó que le había hecho adivinación. El Awó le recordó del sacrificio que había obviado hacer y que su ángel guardián le estaba advirtiendo que no iba a tener ningún sentido regresar al mundo sin realizar sacrificios. Una vez más, él desistió con desespero, argumentando que no tenía suficientes fondos para realizar los sacrificios.
Cuando regresó al mundo sin hacer sacrificios, nadie lo tuvo en cuenta porque quedó como un charlatán. Él posteriormente se dio por vencido y dejó la práctica de Ifá por la agricultura. Él también fracasó con granjero y vivió una vida de pobreza extrema hasta el final de sus días.
Cuando aparece este Ifá en Ugbodu, se le aconsejará a la persona que haga los sacrificios elaborados que este Odu rehusó realizar en el cielo, que si rehusara hacer, podría enfrentarse a penurias. Es un Odu infortunado y tomará una gran cantidad de sacrificios para remover el estigma de falla de su destino. Si aparece en adivinación ordinaria, se le aconsejará a la persona que vaya a casa de sus padres para revocar una maldición sobre él de una encarnación previa. Si el Ifá aparece en adivinación para una persona razonablemente exitosa, se le debe advertir de no asociarse con personas de mala suerte.

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