Irosu Ate Ese Ifa 2

SE HIZO ADIVINACIÓN ANTES DE DEJAR EL CIELO

Aperin nia mowodudu, Agbe toko bo ri şi o şio. Ellos fueron los dos Awos quienes hicieron adivinación para este Odu antes de que dejara el Cielo para ir a la Tierra. Se le aconsejó que sirviera a Eşu con un chivo, a su ángel guardián con una chiva, gallina, paloma, tortuga, babosa, jutía, pescado y guinea y a la divinidad del obstáculo con maíz, plátano, ñame, gallo, calabaza con agua y un paquete de leña en el lindero entre el Cielo y la Tierra. Él hizo el sacrificio antes de dirigirse al mundo.

Llegando a la Tierra él estaba practicando el arte de Ifá a tiempo completo. Él fue muy exitoso porque su generosidad y racionalidad le trajo muchos clientes. Cuando los Awos tradicionales quienes usualmente cobraban honorarios exorbitantes por sus trabajos no tenían ya mucho que hacer, sus enemigos en el cielo lo reportaron ante Dios que él estaba alterando la paz en el mundo. La divinidad del obstáculo (Elenini o Idoboo) fue señalado por Dios para verificar la situación de las cosas en la Tierra. Luego, Elenini decidió visitar el mundo para investigar qué estaba sucediendo. Antes de ir al mundo, él envió un mensaje a todas las divinidades de que iba a hacerles guerra a todos los responsables por admitir que la maldad floreciera en la Tierra.

Cuando Ogún recibió el mensaje de Elenini, levantó una enorme arma para hacer un ataque anticipado contra el ataque inminente de Elenini. En conocimiento de las maquinaciones de Ogún de esa acción anticipada, él se sentó en el camino y tiró hacia atrás el sombrero que tenía puesto. La acción bloqueó efectivamente todos los caminos, así prevenía que cualquiera pasara a través. Ogún y su ejército llegaron para descubrir la barricada y ellos no pudieron atravesarla, porque el bloqueo era a prueba de hachas y machetes.

Después de luchar en vano para cruzar a través de la barricada, ellos se cansaron. Fue cuando Elenini volteó su cara hacia ellos para preguntarles qué estaban tratando de hacer. Cuando Ogún explicó que ellos trataban de pelear contra las fuerzas de Elenini del Cielo, éste dispuso de Ogún y sus tropas y los convirtió en una hoja el cual lo guardó en su bolso.

Şangó fue el siguiente en enfrentar la situación. Cuando se encontró con Elenini, éste lo convirtió en una piedra y lo guardó en su bolso. Todas las otras feroces divinidades sufrieron el mismo destino en las manos de Elenini. Mientras tanto, Orunmila acudió a Ifá para ver cómo pactar con la calamidad que se aproximaba y le fue dicho que prepara un festín con una chiva en anticipación al acontecimiento próximo de acercamiento de las fuerzas del Cielo. Se le aconsejó incluso que elevara una procesión de bailarines para dar la bienvenida, en vez de combatirlos.

Posteriormente, Orunmila preparó comidas y bebidas en casa y dirigió a toda su familia después de frotarse la cascarilla de la paz en sus caras y ellos cantaron y danzaron para encontrarse con la divinidad más fuerte creado por Dios. Ellos no solamente cantaron en alabanza a Elenini sino que también lo llamaron el más fuerte de todas las divinidades y mortales. Cuando Elenini escuchó el ruido de bailes y cantos de la comitiva de Orunmila, él una vez más tiró su capa para bloquear el camino.

Orunmila llegó a la barricada sin saber qué hacer. Él sin embargo continuó cantando y bailando hasta que Elenini quedó convencido de que ellos no habían venido a pelear sino a hacer las paces. Él posteriormente volteó su cara para preguntar quiénes eran ellos y Orunmila replicó que él era la divinidad de la sabiduría y que había venido a darle la bienvenida en la Tierra. Cuando Elenini le dijo a Orunmila que entrara a su bolso, él invitó a la divinidad del obstáculo a su casa para el festín que había preparado para él. Él prometió entrar al bolso después de que Elenini hubiera cenado y bebido porque debería estar hambriento por su viaje tan largo. Elenini mientras tanto estaba disfrutando los cantos y bailes y estaba completamente alegre de acompañar a Orunmila a su casa.

Él llegó a la casa de Orunmila para encontrar un mesón colocado para una fiesta suntuosa. Él comió y bebió hasta quedar contento. Después de comer y beber, Elenini pidió para que repitieran la actuación de los cantos y bailes. Cuando todos estaban bailando, Elenini miró a Orunmila, diciéndole que él había venido al mundo porque Dios le había dicho que él (Orunmila) estaba dañando al mundo. Él observó que estaba convencido que lejos de estar dañando al mundo, él era el único que estaba esforzándose para hacerlo más habitable. Él concluyó que lo dejaría en la Tierra para que continuara con su buena labor, pero que iba con el resto de las otras divinidades de regreso al Cielo.

Después de expresar su gratitud por apreciar su humilde gesto, Orunmila observó que él no podría disfrutar de la vida como un solitario en la Tierra. Él suplicó que soltara a las otras divinidades. En respeto a los ruegos de Orunmila, Elenini soltó a los otros advirtiéndoles desde entonces de abstenerse de conductas malévolas.

Si este Ifá aparece en Ugbodu, la persona debe ser aconsejada para hacer este elaborado sacrificio porque él estaba destinado a ser muy próspero, dado que el tiene buen corazón y disposición humana. Cuando aparece en adivinación para una persona quien tiene un caso pendiente, se le aconsejará que sirva a Eşu con un chivo en función de recibir un fallo judicial favorable.