No hay guerra en el campo, no hay conspiracion en la ciudad
No hay guerra en el campo, no hay conspiracion en la ciudad. Esto fue adivinado para Olofin Iwajo. Ellos dijeron que su tenencia de cargo como jefe sería buena. Ellos dijeron que Olofin debería sacrificar para que la alegría de su época no hiciera a la gente convertirse en perezosos o locos. Ebo: 16 caracoles de babosa, 1 perro y 14.000 cowries. Él escuchó y sacrificó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario